¿Legislatura agotada?

Cada legislatura tiene su leit–motiv. Si mal no recuerdo, (yo era muy joven), las primeras legislaturas de Felipe González, quisieron ofrecer una imagen moderna de España, (frente al sofocante escenario gris del franquismo y de la transición), a la vez que conseguían que entráramos en la CEE. Las últimas pretendieron sofocar los múltiples problemas que habían crecido durante las anteriores legislaturas, como la crisis económica, el paro, y la corrupción, y que evidentemente no pudieron solucionar. La primera legislatura de Aznar en cambio, suponía acabar con la corrupción más sangrante, y hacer los duros ajustes económicos para que pudiéramos entrar en el Euro. Fue una buena legislatura, por que consiguió solucionar ambos problemas. La siguiente legislatura, tuvo como único motivo disfrutar del poderío económico y político de nuevos ricos, y así nos fue, por que este país en todos los aspectos, (en el económico, en el social, en el cultural, y en el político), tenía, y tiene los pies de barro.

No puede competir ni en unidad política ante los graves problemas nacionales, (como en su caso si que sucede en EEUU, Francia, o Gran Bretaña), ni en fortaleza económica, (como los países del G-7, China, o la India), ni en cultura, (ya que carecemos de industria y de una educación de calidad). Para bien o para mal, somos más parecidos a Italia, pero sin sus grandes empresas industriales, y solo nos diferenciamos de Hispanoamérica por tener una economía más saneada que ellos, resultado de tener la renta mejor distribuida. Por lo demás, este país podría caer bajo cualquier régimen, (autoritario, anárquico, etc.), como una fruta pasada en caso de tener que enfrentarse a problemas graves.

Esto lo digo por la actual situación de impasse que se está dando en la presente legislatura. Vendida como la legislatura de la paz, no ha solucionado realmente nada. El terrorismo islámico sigue siendo tan peligroso, el terrorismo vasco sigue más que presente en la actualidad política, y la famosa Alianza de Civilizaciones, es una entelequia sin sentido práctico que no llegará a ninguna parte. Ya olvidados, y a un lado del camino, quedan los mensajes de incremento de la productividad, y del cambio del sistema económico. Seguimos siendo el país del turismo, (pero ya con menos playas vírgenes), de la industria de mano de obra barata, y solo nos quedan las constructoras, algunas pocas industrias competitivas, los bancos, y un par de empresas de distribución. En realidad, una economía inconexa, con graves problemas frente a la competencia exterior, inflacionaria por necesidad, e incapaz de mantener el tipo en caso de que el ciclo económico internacional se retraiga. Así que, por mucho que se empeñe nuestro presidente de agotar la legislatura, las cosas van a irle mal. Empecinarse en negociar con ETA, solo le provocará una mayor pérdida de popularidad, y en el peor de los casos algún que otro “accidente”. El resto de problemas que aqueja nuestra pobre país no se pueden encarar ni resolver en un año. Solución, elecciones anticipadas, y cuanto antes mejor para él, y que no se olvide de buscar un leit-motiv para su próxima legislatura, por que decir lo malo que es el PP, me temo que ya no vende como hace tres años.